«Lo que ocurre en las fiestas en las fiestas se queda, como en Las Vegas»
Tal vez piensa Pilar (Pilar Rubio, no Pilar Barreiro que esta se lo sabe todo) que esto es un despiporre, que aquí tenemos noches en las que con tanta espada nos hinchamos a matarnos y luego seguimos el resto del año encabronados y con la falcata entre los dientes esperando nuestra oportunidad... y que mejor nos matemos solo en el campamento y pelillos a la mar.
Tal vez piensa Pilar (la Rubio, digo) que con tanto muslo al aire, tanto bestia con los ojos saltones como lobos, y ayudados por los efluvios de la luna, los roces, los bailes del restriegue y sus sudores correspondientes, que fermentadas las pasiones de los bajos, con algunas copas de esas raras que te regalan, que lo más seguro es que nos ponemos t´paya y hacemos la caída del imperio romano vuelta y vuelta en cada esquina de los campamentos, esquinas de los aseo o la churrería un suponer… y que el resto del año vamos persiguiéndonos el resto del año, unos a otros, bien por repetir el revolcón, o bien por restaurar los numerosos honores heridos... y claro, ella sugiere que mejor hagamos como algunos futbolistas, que las cosas del fútbol se quedan en el terreno de juego, y las nuestras, en el campamento...
No se, da la sensación que se refiere a algo así.
El pregón, (en caso de que lo dijera) del que yo no me percaté entre tanto lío de voces y protagonistas distintos, que cada uno hacía su mini pregón, tuvo que ser muy, muy flojo, y con un error de tamaño camello cuando parece que dijo que celebrábamos los 200 años de la conquista de Cartagena por los romanos... ¿200 años?
Pues el que se lo escribió se comió un cero, o más bien ella, con la emoción de la cosa, leyó uno de menos, total que más da un cero más o menos, para lo que suelen valer los ceros... verdad?
Pero no, aqui un comerte un cero era comerse 1.800 años, que tampoco es moco de pavo...
Bueno Pilar, yo solo te digo que te vi guapísima (a la Pilar Rubio, claro) con tus cautivadores ojos que dan gusanillo incluso a los desgastados moradores de este poblado, y que, que más da, si no se te entendía nada, con ese horrible sonido de cajas y baffles rajados y mal sonantes.
Pero Pilar, (ya sabeis a quien se lo digo) que guapa eres condená… pero que bastante, bastante; en fin, y lo de tu pregón (si es que lo dijiste) algo patatero, pues ya se sabe, cosas del directo.
fotos de La Opinión
Tal vez piensa Pilar (Pilar Rubio, no Pilar Barreiro que esta se lo sabe todo) que esto es un despiporre, que aquí tenemos noches en las que con tanta espada nos hinchamos a matarnos y luego seguimos el resto del año encabronados y con la falcata entre los dientes esperando nuestra oportunidad... y que mejor nos matemos solo en el campamento y pelillos a la mar.
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| Fachada del Ayuntamiento con los estandartes festeros |
No se, da la sensación que se refiere a algo así.
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| Pilar y Antonio |
Pilar Rubio, pregonera de cartagineses y romanos 2011
El pregón, (en caso de que lo dijera) del que yo no me percaté entre tanto lío de voces y protagonistas distintos, que cada uno hacía su mini pregón, tuvo que ser muy, muy flojo, y con un error de tamaño camello cuando parece que dijo que celebrábamos los 200 años de la conquista de Cartagena por los romanos... ¿200 años?
Pues el que se lo escribió se comió un cero, o más bien ella, con la emoción de la cosa, leyó uno de menos, total que más da un cero más o menos, para lo que suelen valer los ceros... verdad?
Pero no, aqui un comerte un cero era comerse 1.800 años, que tampoco es moco de pavo...
Bueno Pilar, yo solo te digo que te vi guapísima (a la Pilar Rubio, claro) con tus cautivadores ojos que dan gusanillo incluso a los desgastados moradores de este poblado, y que, que más da, si no se te entendía nada, con ese horrible sonido de cajas y baffles rajados y mal sonantes.
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| Pilar Rubio, pregonera |
fotos de La Opinión
