Como cada 12 de julio recordamos la proclamación del Cantón de Cartagena

Este año, se han cumplido 140 años del alzamiento del Cantón cartagenero, pues así debe de llamarse a aquella revolución que murió bajo la más cruel de las gestas que los militares españoles hayan tenido que hacer contra sus propios conciudadanos, bajo las ordenes de un miserable gobierno centralista  que no dudó en bombardear a una pequeña ciudad llena de mujeres y niños.

Antonete Gálvez

Mientras que otras ciudades, capital de su región y excusa de su separatismo, tiene que inventarse historias revolucionarias y agresiones totalmente falsas, a Cartagena le sobran los motivos para  ser la eterna cabreada con su región y hasta con España si me apuran.

En 1873 y 74 sufrimos una masacre que hoy no sería tolerada por las naciones, que solo le interesó a medios franceses e ingleses, y que muchas de las noticias publicadas en España eran falsas, silenciadas, despreocupadas con las penas, muertes y hambre de la pequeña población que no importaba a nadie.

Sin caer en el romanticismo ni tener que inventar nada, tuvimos una revolución que muy pocos se han interesado en aclarar ni contar la verdad, pero con justicia.

El Cantón de Cartagena fue el de más larga duración de todos los cantones que se constituyeron en 1873; Cartagena consiguió resistir el asedio de las fuerzas del Gobierno central hasta el 12 de enero de 1874.

Es innecesario decir que de nuevo, nos masacraron a placer.

El cartagenero, es el pueblo más veces invadido, meado en sus cabezas y pisoteado hasta reventarlo por sus propios "vecinos y compatriotas" somos unas "madres" que resistimos encerradicos en nuestras muy franqueables murallas, y la artillería de cualquier clase, juega al tiro de pichón con nuestros antepasados; y tranquilos, que si hace falta, lo volverán a hacer.

Hay cientos de publicaciones y artículos sobre este tema concreto que es muy fácil de buscar: - cantón de Cartagena - por ejemplo, y si tienes ganas de leer te vas a "jartar".

Compañeros y hermanos de esa sangre nunca derramada por nosotros, el papanatismo lo impregna todo, la corrupción y el robo directo, dejan a las ideologías y las grandes gestas, más destruidas que el peor de los maremotos.
Muchos dicen que no vale la pena seguir soñando, que esto de la provincia en estos tiempos de ruina es imposible, desde luego no hacen referencia a los muchos años de esplendor económico y de ideas valientes y definitivas… no hacen referencia a eso, por que lo más seguro es que estuviera más de uno mangando para "la organización correspondiente" y ya que estaban allí, pues ya sabemos lo que tantísimos distraían "sin querer ni na de eso" para sus propios bolsillos.
Que de coches, que de juergas, que de queridas y queridangos… "que no nos farte de na…" y no les ha faltado, desde luego.

El simbolismo de la declaración de independencia del llamado "Cantón de Cartagena" es mucho más que una vieja reliquia de "los cuatro chalaos de siempre". Hay alguna verdad en eso de cuatro, pero muchas mentiras en lo de vieja reliquia, el cartagenero ama a su tierra, y cuando no tiene miedo de perder su trabajo o su sillón, habla claramente de las injusticias y abusos de poder que siglo tras siglo venimos padeciendo, y eso, eso es lo revolucionario, esa llama no se apaga, a veces se disimula en público (la cobardía es difícil de domar) pero luego sabemos los comentarios que se hacen a la oscuridad protectora de ese bar y de ese reservado del restaurante.

La ilusión no a muerto, le costara salir a flote, pero con esa ilusión vivimos alguno más que los manidos "cuatro chalaos de siempre" algunos más.

Cartagena, querida Cartagena...