Harold Camping anuncian que el fin del mundo llegará... la víspera de las elecciones autonómicas y municipales.
Así lo afirma un estudioso de la Biblia, que se basa en el día de la Creación, la crucifixión de Jesús y el número de pasajes de la Biblia y eso le suma = a fin del mundo.
Pues listo, antes o después hay que cascarlas y ese día es bueno, así nos ahorramos el horror de ver quien palma, quien hace un espantoso ridículo y a la otra coronándose otra vez como reina suprema de la cosa.
Algo es algo tu.
La víspera de las elecciones, se acabará el mundo, gracias a Dios. LA RAZÓN.
Tanto esfuerzo, el de Francisco Álvarez Cascos, tirado a la basura. Tantas promesas, las de los dirigentes del PP, que caerán en saco roto. Tantos miedos, los de Zapatero y los suyos, que al final serán infundados. Si se cumple el más reciente vaticinio del Apocalipsis, el fin del mundo llegará el 21 de mayo, víspera de las elecciones autonómicas y municipales en España. Será un gran terremoto que abrirá las tumbas y "esparcirá en estiércol los cuerpos de los pecadores".
¿Qué estará usted haciendo el próximo 21 de mayo, sábado para más señas? Es tiempo de comuniones, de excursiones para aprovechar el buen tiempo y, para muchos españoles, de reflexionar ante las elecciones municipales y autonómicas que se celebrarán al día siguiente. Pues bien, si se cumple la última predicción del Apocalipsis, ni se moleste. Ese día un gran terremoto anunciará el Día del Juicio Final.
La premonición la ha anunciado al mundo, a través de su emisora de radio, Harold Camping, un estudioso de la Biblia que cuenta con una congregación de seguidores al margen de cualquier religión, y que se ha pasado 54 de sus 90 años de vida escudriñando las Sagradas Escrituras, página a página, versículo a versículo, en busca de una señal que, por fin, ha encontrado. Para ello, se basa en un cálculo cuanto menos curioso.
A saber: si al día de la creación del mundo (año 11.013 A.C.) se le suman el día en que Jesús fue crucificado (viernes, primero de abril del año 33 D.C.) y los números de los pasajes de la Biblia, se establece que el 21 de mayo del 2011 será el inicio del día del Juicio Final, que terminará el 21 de octubre. Los que sobrevivan no tendrán un destino mejor. "Cualquiera que quede vivo después de ese día, será aniquilado por el fuego y nunca más será recordado", augura.
"Cuerpos lanzados sobre estiércol y arena"
La profecía de este experto no puede ser más desalentadora: "Un gran terremoto sacudirá la Tierra el 21 de mayo del 2011, uno que jamás el planeta haya sentido en su historia. Las tumbas se abrirán y los restos de las personas que murieron como verdaderos creyentes y seguidores de Dios resucitarán y se irán al cielo. Los cuerpos de los que no se salvarán serán lanzados sobre estiércol y arena, y sus restos se desintegrarán de la vergüenza ante los ojos de Dios; serán comidos por los gusanos y los animales".
En una entrevista concedida al periódico colombiano El Tiempo, Camping asegura que "Dios escribió la Biblia de una manera compleja y difícil de entender", pero "lo hizo para advertirnos de lo que vamos a sufrir por los pecados de la humanidad".
Harold Camping ha hecho el anuncio como acostumbra, a través de la emisora "Family Radio", que abrió en 1961 para comunicar sus interpretaciones de la Biblia, y que se escucha en las principales ciudades de EE UU.
Camping, un ex ingeniero civil de la universidad de Berkeley, no pertenece a ninguna religión y está considerado como un falso profeta, pero sus seguidores siguen con devoción sus mensajes.Y eso pese a que en 1992 tuvo un "error de cálculo" al predecir la llegada de un nuevo Jesús en 1994. "Fue un versículo que no supe interpretar. Ahora lo he entendido, y sé que su llegada será para 2011, cuando se acabe el mundo", se justifica ante eltiempo.com.
Hasta ahora nadie ha detallado con semejante detalle y crueldad cómo será el fin del mundo, ni siquiera la civilización maya, ni lo ha situado en el 21 de mayo de 2011.
Es decir, un día antes de las elecciones municipales y autonómicas en España. Nos quedaremos, por tanto, sin saber cuántas comunidades arrebatará el PP al PSOE. Jamás sabremos si a Álvarez Cascos le ha merecido la pena el órdago. Y nunca desvelaremos la incógnita: ¿será Rubalcaba el candidato del PSOE?
