domingo, 19 de septiembre de 2010

CARTHAGINESES Y ROMANOS Y Qart-Hadast

Qart-Hadast. El nacimiento de la Ciudad Nueva
 Junto al mar y rodeado de varias tropas, alineadas a ambos lados del escenario, Asdrúbal nombró a Aníbal, hijo del Amílcar –fallecido en la contienda contra los íberos– jefe de la caballería. «Os juro que emplearé el fuego y el hierro para quebrar el destino de Roma», dijo el joven Barca ante el cadáver de su padre, mientras que Asdrúbal aceptó con orgullo el mando de las tropas púnicas.
Los dioses te conceden que, desnudo de afectos, de la fría libertad de las cumbres goces. Quien quiere poco, tiene todo; quien nada tiene, es libre; quien no tiene o desea, hombre, es como los dioses, le susurró Qart–Hadast en sus sueños.












De este modo, gracias a las negociaciones pacíficas de Asdrúbal con los tartesos, la ciudad íbera pasó a ser púnica –en el año 223 antes de Cristo– y se convirtió en Qart-Hadast. El nacimiento de la ciudad nueva dio lugar a la celebración de la Fundación, que tuvo lugar en la explanada del Estadio
 Los guerreros salen de caza nocturna
Las falcatas ya están afiladas; las 'gladius', bien relucientes. Cae la noche sobre la Atalaya, y carthagineses y romanos se preparan para conquistar el campamento entre redobles de tambores. La suerte está echada y la diversión, asegurada
Juntos, mejor. Las tropas llegan a sus campamentos después del desfile. 


Otros sangrientos mercenarios trocean a sus víctimas, todo vale en la guerra.

Otros cazan pero en vivo y en directo, la presa no se resiste y acumulan prisioneras para los posibles cambios, la batallas tienen mil estrategias.


Allí desenvainan sus falcatas y dan rienda suelta a sus emociones.













!LOS MERCENARIOS IBEROS VAN DE CAZA!




EL PRESIDENTE DE LAS FIESTAS ANTONIO MADRID Y EL PREGONERO CARLOS LATRE